Azul, decía y de inmediato la respuesta “Qué lindo nombre” “Qué original”, seguido de frases que iban de lo tremendamente cursi “Azul… como el cielo” a lo incomprensible. En una de esas ocasiones, alguien le había mencionado que si bien el color del cielo era azul-celeste, el del infierno debería acercarse al azul-cobalto, de ahí había tomado el nombre para su última colección, una selección cuidadosamente realizada de diseños, telas, escenarios, etc. Todo había sido cuidadosamente vigilado, la selección de la música, las modelos, las invitaciones. Ningún detalle había quedado fuera de su atención.
Lo mas difícil, había sido sin duda alguna y como siempre, el trabajo con las modelos, mujeres insoportablemente bellas pero también, insoportablemente volubles. Sometidas a dietas y ejercicios rigurosísimos, tratamientos, drogas, las volvía las mujeres mas mounstrosas del mundo.
Si bien el trato con la mayoría de las modelos había fluctuado entre la aceptación y la tolerancia, la llegada de Janna había roto la ya de por si quebrantada cordialidad en el ambiente de quienes trabajaban en el desfile.
La joven brasileña de apenas 19 años, llegaba a todos lados con un perro pequeño y escandaloso al que cariñosamente llamaba “petit” seguida de un grupo de empleados que atendían cada capricho, de la chica y del perro. El agua, las ensaladas, los maquillajes, el celular, absolutamente todo debía estar a mano y listo para usarse.
Pero todo valía la pena, Janna cerraría el desfile con un vestido de novia color azul fortísimo y metálico al que el diseñador llamó “Azul Cobalto”, la creación mas bella de toda su vida, elaborado con telas que él mismo había buscado en la India, Italia y otros países, hasta lograr las tonalidades, los vuelos y las formas que el vestido tenia en su imaginación.
Cuando en uno de los ensayos finales se lo mostró a la modelo, ella esbozó una mueca de indiferencia, torciendo la boca y cerrando un poco los ojos mientras observaba hacia otro lado “Azul Cobalto” dijo “Original, ¿eh? Sobre todo para alguien con tu nombre” Azul deseó correrla, sacarla del evento y no aguantar mas sus histerias, sus manías y su perro, pero sabia que aunque los diseños tendrían una buena recepción del público, era conciente de que necesitaba a una de las modelos mas cotizadas para asegurar un triunfo absoluto.
La fecha llegó y la hora se acercaba, la logística y el equipo de Azul corrían de un lado a otro, corrigiendo pequeñas fallas en los detalles y atendiendo a las personas de prensa y otros invitados.Janna había pedido un camerino exclusivo y en él se respiraba aun más estrés y escándalo que en el resto del salón. De pronto, todo fue una locura, algo faltaba, una brocha para el maquillaje o el platón de la comida de Petit. Se escuchaban gritos y objetos que golpeaban y caían, entre voces que trataban de calmar a la chica mientras ella los sacaba a todos de la habitación.Azul corrió y tras de él, dos de sus asistentes cargando una funda negra que contenía el vestido de novia. Preguntó lo que pasaba y le explicaron. Algo se había perdido y Janna enfureció “Está loca” dijo alguien y otro mas comentó “No habrá poder humano que la haga salir”. Se quedaron viendo unos a otros. Azul llamó a la puerta varias veces pidiendo entrar sin respuesta, entonces pidió que trajeran las llaves, tenia que entrar y convencerla.
Abrieron la puerta, tomó la funda con el vestido y entró mientras afuera los demás se relajaron y dispersaron atendiendo los pendientes del desfile.
En el camerino, Azul encontró a Janna recostada y fumando mientras acariciaba a Petit. Ella pregunto que porque había entrado y él le contesto que debían hablar, le contó de la importancia del desfile, de quiénes estaban ahí esperándola, que era la estrella, pero nada daba resultado, la chica se empeñaba en quedarse encerrada. Entonces Azul le habló del contrato que había firmado y las consecuencias de incumplirlo, ella lo observó por primera vez de frente y llena de furia, comenzó a gritar insultándolo y humillándolo, preguntándole que como se atrevía a amenazarla con algo tan vulgar como un contrato, Azul trataba de calmarla, de disculparse, pero era inútil, incluso había sacado el vestido de la funda para mostrárselo y decirle lo hermosa que se vería en el en unos minutos mas. La situación se torno caótica y un tanto cómica, pues mientras Janna caminaba manoteando por toda la habitación seguida de Petit y sus ladridos chillantes y escandalosos, Azul sorteaba toda clase de movimientos y balanceos sosteniendo el vestido.
Fue solo un instante, un descuido y un salto de Petit que fue a dar a la falda del vestido rasgando y haciendo una larguísima cortada, Azul se quedó petrificado y Janna vio la situación mientras intentaba aguantar la carcajada. Él la observo enfurecido y de una patada lanzo al perro contra la pared. Ella corrió a levantarlo y volvió la escena de los gritos, en esta ocasión de ambos maldiciéndose. El perro en los brazos de la chica emitía apenas unos gemidos casi inaudibles, en tanto que Azul tomaba el vestido y lo observaba mientras intentaba esconder la rasgadura entre las telas, lo deja sobre un sillón y se dirigió a Janna tomándola del brazo y exigiéndole que saliera, que se pusiera el vestido y desfilara. Ella se resistió, jalonearon hasta que él le dio una bofetada que la hizo caer de espaldas sobre una mesa.
El desfile comienza y todos esperan la aparición de Janna que sigue inmóvil sentada en una silla y con el vestido azul puesto. Esta maquillada y peinada pero a pesar de eso, se ve distinta, la gente pasa a su lado y la observa, Azul evita las preguntas y dice que fue algo, una droga o pastillas que tomó, que igual saldrá al desfile y le preparan una plataforma deslizable sobre la que Azul acomoda a la chica con sumo cuidado, observando que no se note el desperfecto en el vestido y hacerla pasar como una actuación para el cierre de la pasarela.
Janna sale, empujada por Azul y entre aplausos y flashazos de fotografías él sonríe, mientras por el cuello de la chica corre un delgadísimo hilo de sangre.
Luis Martin Ulloa
Diana Sofía Sanchez
Nylsa Martínez
Patricia Bazaldua
Cástulo Aceves
Yvonne Bagnis
Juan Antonio V.B.
Yolanda Gámez
Francisco Jalomo
Fecha/Envio Cuento |
Autor Cuento |
Fecha/Limite Tallerear |
14-Sep-06 |
Yolanda |
25-Sep-06 |
05-Oct-06 |
Nylsa |
16-Oct-06 |
19-Oct-06 |
Cástulo |
30-Oct-06 |
02-Nov-06 |
Yvonne |
13-Nov-06 |
16-Nov-06 |
Jalomo |
27-Nov-06 |
30-Nov-06 |
FIL |
* Posponer 8 dias |
07-Dic-06 |
Diana |
11-Ene-07 |
11-Ene-07 |
Luis Martin |
22-Ene-07 |
25-Ene-07 |
Paty |
05-Feb-07 |
08-Feb-07 |
Juan Antonio |
19-Feb-07 |
22-Feb-07 |
Juan Salvador |
05-Mar-07 |
08-Mar-07 |
Yolanda |
19-Mar-07 |
21-Mar-07 |
Nylsa |
02-Abr-07 |
05-Abr-07 |
Cástulo |
16-Abr-07 |
19-Abr-07 |
Yvonne |
30-Abr-07 |
03-May-07 |
Jalomo |
14-May-07 |
17-May-07 |
Diana |
28-May-07 |
31-May-07 |
Luis Martin |
11-Jun-07 |
14-Jun-07 |
Paty |
25-Jun-07 |
28-Jun-07 |
Juan Antonio |
09-Jun-07 |
12-Jul-07 |
Juan Salvador |
23-Jul-07 |